En esta foto el quid de la cuestión está en el segundo minero por la derecha. Menos mal que no se ha liado con los carteles y cada uno – se supone- va donde debe (aunque hay una inquietante inclinación en el que el minero sostiene con la mano derecha, como si en cualquier momento pudiera hacer un comprometedor enroque). También a la foto la salva un poco la fecha. Imagínense que se publica en Navidad,en vísperas de lla llegada de los Reyes Magos. Luego están también otros detalles, como que todos los mineros parecen más pendientes de la persona, a la que no se ve, que viene detrás del presidente Zapatero, mientras que en este ninguno de ellos fija su mirada, como si ya no estuviera, como si ya hubiera pasado….Pero bueno, todo eso que lo cuente Millás en el EPS que seguro que además tiene la foto buena y no esta cutrada que he colgado yo y que he tenido que fotografiar porque el escáner no chuta y porque en la edición digital de El País no la encuentro, no sé si será porque, seguro, no he sido el único que ha hecho esta dixlesica reflexión al verla.
«¿Por qué no me llaman a mí, porqué no me llaman a mí?», me preguntaba en las dos ediciones anteriores. A mí, que soy una autoridad en esto el cuento sanferminero- me atrevería a decir que hasta el creador del subgénero o al menos de un subsubgénero y hasta tengo una
teoría sobre el mismo, expuesta en el prólogo de mis «
Cuentos sanfermineros»… ¿Por qué? No era justo. Hasta llegué a presentarme, en desagravio, a la primera edición, en plan «pues ahora no vais a tener más remedio que darme el premio (luego bajé de las nubes y no estuve ni entre los finalistas)».
Pues bien, esta vez, causando baja a su pesar
Eduardo Laporte, al que es un honor sustituir, voy a formar parte del jurado del
III certamen internacional de microrrelatos sanfermineros, junto con
José Luis Allo y Carlos Erice (elegiremos entre los 20 microrrelatos que previamente otros seleccionen; muchas veces los que hacen esas lecturas previas son los verdaderos jurados) No es la primera vez que soy miembro de un jurado (literario, también fui jurado de un concurso de pinchos en mi barrio, La Txantrea, eso sí que estuvo bien, aunque yo fuera un segundo plato -«Es que no encontrábamos a nadie», me dijeron cuando me lo ofrecieron-) y no es algo que me agrade mucho -lo de ser jurado literario- es como pasarse al otro lado, cambiarse la chaqueta… (En uno de esos concursos en los que fui jurado incluso hubo pufo, yo salí de una deliberación con un ganador y luego en la prensa apareció otra y ni rastro del ganador, eso lo voy a contar algún día porque en su momento no pude o no me dejaron). Pero bueno, el caso es que me hace ilusión. Y que yo por unas botellicas de tinto (navarro) y unas viandas de la tierra hago lo que sea.
En el
www.blogsanfermin.com, que son quienes lo organizan con el patrocinio de las bodegas
Príncipe de Viana, podéis encontrar las bases y, ¡hala, a participar, que ya falta menos! (y si lo hacéis yo no os conozco de nada).
Pues yo también estoy de elecciones. El próximo día 21, jornada de reflexión, presento mi nueva novela
¡OH, JANIS, MI DULCE Y SUCIA JANIS! Memorias de una estrella del porno amateur.
Ahí arriba va mi primer poster electoral, la portada del libro y aquí abajo´unas elogiosas palabras de mi entusiasta editora en una entrevista en Leer:
«Una novela anarquista, erótica y llamativa, un texto atrevido que atraviesa con su fuerza los límites de la burguesía»
Y dentro de poco la campaña electoral, noticias sobre el candidato (una primicia: además de en Madrid, Barcelona y Pamplona, también habrá mitin en la Semana Negra de Gijón) y un emotivo mensaje en el que os contaré porque tendréis que darme vuestro voto.
Se va uno unos días y… no pasa nada. El mundo se pone patas arriba, a Bin Laden le hacen un photoshop por lo civil y lo criminal, las gentes salen a la calle a festejarlo, como quien pasa las semifinales de la Champions, el Real Madrid, por cierto, se mourinhiza, ahora son todos unos lloricas y unas víctimas de complots planetarios, y Bildu, qué me dicen de Bildu, ah, no que hay que esperar a mañana para decir algo con fundamento, porque son los tribunales los que deciden, ay que risa, y nosotros acatamos todas las sentencias aunque no las compartamos, etc, en fin, todo está revuelto, y ¿qué pasa?, no pasa nada, a mí plim, yo estaba en la Warner, con mis hijos, con Piolín y con el demonio de Tazmania, tan feliz…
Se va uno unos días y… en realidad no pasa nada. Todo sigue igual. Si tú no mueves ficha nadie se acuerda de ti, no hay emails (excepto para invitarte a estirarte el pito o diciéndote que han cambiado los datos de tu cuenta bancaria en una entidad de la que no eres cliente), no hay buenas noticias, no hay nada en el buzón que no sea publicidad de Telepizza y facturas de Movistar (bueno, miento, había una novela gráfica, La bella huida, que sus autores, a los que no conozco, tuvieron a bien enviarme, y de la que hablaré pronto, porque mola mucho -a ver si cunde el ejemplo, lo de enviarme cosas, digo-).
Por lo demás, mi editora, Clea Moreno Szypowska, que se merece un monumento, me envió las pruebas de la novela para corregir, y la portada, y ya está todo preparado para entrar al horno, después de muchos toquiteos aquí y allá, desaguisados varios… En unos días, pues, habemus libro, y ya veremos si da tiempo a llegar al día 21, jornada de reflexión, y yo puedo irme a Madriz con mi artefacto debajo del brazo. Y a ver si por fin pasa algo.
Una alcachofa, uy qué miedo
Hoy, con motivo del día del libro, en Diario de Noticias publican un reportaje sobre las vicisitudes de ser escritor en esta época de libros electrónicos y feisbuses. Yo aparezco por ahí. El otro día me mandaron un cuestionario con varias preguntas y yo contesté aplicadamente. Me gustan las entrevistas por escrito, en las otras, en las de aquí te pillo aquí te mato, no hay derecho a la duda ni a la rectificación ni a la calma. La inmediatez que exige la radio, el horror vacui, el pánico a la grabadora, la ventaja del que pregunta (que siempre sabe de antemano lo que va a preguntar) a veces hacen que uno se aturulle, no deja lugar a los matices, la reflexión… En fin, que hoy salgo en los papeles e incluso teniendo tiempo para pensar las respuestas esto es todo lo que doy de mí:
http://noticiasdenavarra.com/2011/04/22/ocio-y-cultura/cultura/ser-autor-en-la-era-pirata