Yo estaré mal de punki, pero tú tienes unos ojitos limoneros que ya te digo.
Lo mejor fue el regreso a Gijón encima de la bateria de los Black Hordes y el «Simpatía por el diablo» recibiéndonos en el garito ese.
Es la hostia la cantidad de alcohol que es capaz de asimilar el cuerpo humano.
Fuerte abrazo, compadre
¡Enhorabuena, amigos! A ver si se puede hacer realidad el nuevo proyecto en este año.
¡Vaya pintas que me llevas, Esteban!
Cómo se lo montan vds, señores antólogos! Enhorabuena!