Hoy he leido en el blog de David González sus andanzas con su sobrinita; al final de su post decía que todos su poemas no valen nada comparados con lo que puede ser el poema más hermoso del mundo: tener un hijo. Un poema que él dice, no podrá escribir. Yo no creo que siempre sea así, y más en su caso, que ha escrito poemas memorables y emocionantes, y también que hay niños que efectivamente acaban convirtiéndose de adultos en lo que coloquialmente se conoce -en su sentido chungo-como «un poema», pero yo no he podido evitar acordarme de mis dos niños, y ya que en la entrada anterior me he puesto familiar, aprovecho y los saco aquí.
Este es el primer cuento que ha escrito Malen, con solo ocho meses, tecleando en el ordenador:
B c v r <>BB Bzz n
No me negarán que es una genia. Ni que no se publican por ahí balbuceos semejantes. Bueno, solo era un excusa para colgar la foto con mi libro (una mierda de foto, como que la hice yo, en la que no se ven los ojos tan bonitos que tiene), emulando a otra de Hugo, mi otro poema, en actitud parecida, que ya publiqué hace unos días. Ahora, me limpio las babas y a otra cosa, mariposa.
En efecto, dudo que haya otros bebes que a sus 8 meses ya anden escribiendo cuentos. (debio apretar las teclas con furia). Lo que se hereda no se hurta 😉
jajaja.
En efecto, dudo que haya otros bebes que a sus 8 meses ya anden escribiendo cuentos. (debio apretar las teclas con furia). Lo que se hereda no se hurta 😉
Abrazo a los dos.