X (Un poco de terrorismo cultural)
—O tal vez sí , porque ¿cómo se suicida una identidad múltiple?
La, aunque nada original primera pregunta, que se realizó pues a X, una vez que éste, paradójicamente, se identificó, fue quién era y si tenía algo que ver con Luther Blisset.
—X puede ser Luther Blisset, o tal vez un falso Luther Blisset. Del mismo modo que cualquiera podía ser Luther Blisset, adoptar su nombre, cualquiera puede ser X. X puede ser Z en Vitoria-Gasteiz, publicando un panfleto animando a “desPPpizar” la ciudad. X pudiera ser (esto es una indicación psicogeográfica) cualquiera que secuestrara a Sanfermín en Iruña. X es en definitiva un terrorista cultural. Rechaza el coche-bomba, por ineficaz, carente de imaginación y por motivaciones éticas, pero por estéticas considera ejemplares a las Giraldillas o los falsos Pantanis del Tour de Francia. X considera a la izquierda revolucionaria anquilosada, despojada de autocrítica, y sentido del humor.
—¿Y qué propone a cambio? ¿Que es la Psicogeografía?
—Contestando con un ejemplo práctico X propone una interacción de otros X, por ejemplo –volviendo a SanFermín– un recorrido nocturno urbano que incluyera el secuestro de la figura recientemente colocada en la hornacina de la calle de Santo Domingo de Iruña. El rescate podría ser una rectificación del régimen Tali-Sanz en su política de genocidio cultural (euskera, conservatorio, escuela de teatro –podría obligárseles, por ejemplo, a entregar como rescate la frase “En los próximos sanfermines no contrataremos otra vez a Pedro Osinaga”), copiada mil veces. El impacto mediático sería sorprendente, circunstancia a la que los secuestradores deberían extraer el máximo rendimiento, por ejemplo con falsas liberaciones (colocando de nuevo en la hornacina, en lugar de al santo, un muñeco que se pareciera al Presidente y al que previamente se le habría practicado vudú). La comicidad de las acciones es imprescindible para sustituir rancios mitos por el de, cual moderno y urbano Robin Hood, X, que por supuesto a su vez sería desmitificado toda vez que cualquier “individuo”, entendiendo por tal también asociaciones, partidos políticos, tratara de usurpar su identidad múltiple y anónima. Es solo una propuesta– expone X, dando por concluida la entrevista.
Antes de desaparecer, sin embargo, este redactor logró preguntarle si volveríamos a tener noticias de él, a lo cual X respondió:
—Eso ya no depende de mí.