Una entrevista en Radio Habana
Me la hicieron en 2003 o 2004, cuando fui a escribir una guía de turismo a La Habana, por encargo, del diario Gara, ojalá tuviera muchos encargos de esos, yo allá con mi portátil y mi cámara digital, que, oyes, por entonces cualquiera no los tenía, así que parecía un periodista de verdad, hasta una bolsa de viaje de cuatrocientos euros nos dieron, y como somos muy apañados nos sirvió para pegarnos Anabel y yo allá casi un mes, todo el día de aquí para allá, comprobando si La bodeguita del medio seguía allá, o si los mojitos del Hotel Nacional eran tan cojonudos como decían otras guías, todo muy cansado; el caso es que el editor de la guía me metió en la maleta un libro que había escrito él para que se lo entregara a Pirez, que era un periodista de Radio Habana, al parecer bastante conocido en Cuba, y cuando llamé a este me montó una entrevista que parecía que yo era Hemingway (y ese ha sido uno de mis dos momentos de gloria, el otro fue en un torneo juvenil de baloncesto, que nos llevaron a jugar a Nantes, y nos presentaban de uno en uno, y en el descanso nos ponían en el vestuario gominolas e Isostars, y en un partido en los minutos de la basura yo salí y en un contraataque me pasé el balón por la espalda y luego le dí una asistencia a otro también por la espalda, y el spiker gritó mi nombre por megafonía, y al final del partido vinieron algunos a que les firmara autógrafos, como si fuera el nuevo Corbalán); bueno, a lo que iba, que la entrevista de Radio Habana es esta de aquí abajo, y en ella salen algunas preguntas muy raras -y me imagino que las respuestas todavía más raras- y una voz en off que hace eco y da miedo, por no hablar de la música que pincharon… Vamos, una curiosidad en toda regla, que me ha traído muchos recuerdos de aquel viaje, en el que (ahora en serio) trabajé como un loco y creo yo que con un resultado más que digno; recuerdos que en parte reflejo, ficcionados, en la novela que publicaré dentro de nada, ¡Oh Janis, mi dulce y sucia Janis!; y otros que aún no he contado en ningún sitio e igual lo hago un día en este blog, porque hay hasta una extraña historia de espías; recuerdos, también, como las conversaciones arborescentes en las calles con los habaneros y su tendencia a irse por las ramas. Más o menos, en fin, como yo en este post, que por fin encuentra la salida para el título que la encabeza, «Una entrevista en Radio Habana», y que es esta que podéis escuchar pinchando la flechita (lo primero que sale es una publicidad que han colado los del Goear, no una tímida apertura del régimen al sistema capitalista) :